La agorafobia o el conocido trastorno de pánico es un tipo de trastorno de ansiedad que se caracteriza por ataques de pánico recurrentes y sin una previa anticipación.

Este trastorno implica tener miedo de ciertos lugares y situaciones que hacen sentirse a uno atrapado e incluye también el miedo a la indefensión y la vergüenza en situaciones públicas.

Si bien, puede variar para todos, los desencadenantes pueden ser tanto lugares abiertos, como cerrados, en grandes multitudes o en lugares en los que apenas hay gente.

Durante un ataque de pánico puede experimentar sensaciones físicas como dificultad para respirar, temblores, dolor en el pecho y ritmo cardíaco acelerado.

A pesar de estos síntomas, hay técnicas y consejos para aprender estrategias que ayudan a superar estos ataques de pánico.

Aquí, voy a mostrarte las opciones de tratamientos seguros y consejos para conseguir superar la agorafobia. ¡Vamos a descubrirlos!

Qué es la agorafobia

La agorafobia implica miedo y ansiedad intensos sobre los ataques de pánico. Las personas que la padecen se preocupan de tener un ataque de pánico en un lugar o en una situación en la que sería difícil escapar, incluso tener miedo de que los demás lo vean.

El miedo extremo y la ansiedad a veces están asociados con la agorafobia y conducen a comportamientos de evitación, esto ocurre cuando se decide permanecer alejado de varias situaciones o lugares que temes que provoquen un ataque de pánico.

Estos comportamientos son variados, pueden incluir distanciarse de los medios de transporte, espacios abiertos, grandes multitudes y pueden derivar a limitar enormemente la calidad de vida.

Consejos para combatir la agorafobia

Si tienes miedo de salir de casa debido a la agorafobia, lo más probable es que sientas sentimientos de soledad y aislamiento. Sin embargo, no te preocupes, hay algunos pasos que puedes seguir para controlar los síntomas. ¿Cuáles son estos pasos a seguir?

  • Busca ayuda profesional.

La agorafobia es una condición tratable y hay numerosos especialistas en salud mental que pueden ayudarte a controlar tus miedos y diagnosticar un plan de tratamiento, incluso eliminando por completo el pánico.

Generalmente, la agorafobia se desarrolla en el primer año en que la persona comienza a tener ataques de pánico persistentes e inesperados. Por lo tanto, es importante buscar ayuda de un profesional tan pronto como surjan los síntomas. ¡Una vez que busques la ayuda necesaria te sentirás mucho mejor!

  • Aprender técnicas de relajación.

Aunque parece algo sencillo y que no va a dar resultados, las técnicas de relajación son estrategias de autoayuda que pueden conseguir aliviar los sentimientos de ansiedad.

Estás técnicas consiguen aliviar la tensión en todo el cuerpo y relajar cualquier nerviosismo mental.

La relajación se puede aprender de forma sencilla, desde casa o incluso en algún grupo de relajación, como profesores de yoga. ¡Tú decides!

Comienza a trabajar estas estrategias con regularidad para controlar los ataques de pánico y disminuir los pensamientos negativos.

  • Reducir el estrés.

El estrés es una de las principales fuentes importantes que generan ansiedad, de hecho está relacionado con muchos problemas de salud física y mental.

Además, demasiado estrés puede desencadenar alguno de los síntomas que padeces, por ello es recomendable aprender alguna técnica de control de estrés.

Algunos de los más utilizados y que mayores resultados dan son los ejercicios de respiración profunda y la visualización, donde se utiliza la imaginación para verse a uno mismo en un entorno más tranquilo y sereno.

  • Practica la desensibilización.

Es uno de los consejos que mejores resultados consigue. La desensibilización es una popular técnica que puede aprenderse por cuenta propia o mediante terapia.

Implica el uso de la imaginación para ayudar a superar los desencadenantes asociados con los ataques de pánico y ansiedad, para ello hay que imaginarse en esa situación de agobio pero dentro de un entorno seguro.

Es decir, estando en un lugar seguro como puede ser el hogar imaginamos una situación que provoca entrar en pánico e imaginar cómo controlar la mente y la situación. Al estar en un entorno seguro nos ayuda a comprender mejor el problema y afrontarlo de manera diferente a cuando se padece en público.

Con esta técnica, en muchas ocasiones se consigue reducir el pánico y las conductas de evitación.

Sí sufres de agorafobia no te preocupes, no estás solo, millones de personas la padecen al año por lo que hay profesionales y numerosas técnicas para ayudarte a superarlo.

Como has podido comprobar, el poder de la mente y conseguir controlar tu estrés hacen que la agorafobia llegue a desaparecer por completo. ¡Es hora de poner en práctica estos consejos!